¿Quieres saber cómo armonizar la energía Chi en tu casa?
Descubre estos consejos fáciles de seguir.
Consejo nº 1: Vacío y orden
A nadie, salvo a los perezosos negligentes, le gusta una casa desordenada.
No te sientes bien cuando estás allí, te hace sentir incómodo y quieres marcharte.
Si te encuentras en una situación así, ya estás practicando el Feng Shui sin ni siquiera saberlo.
¡Sigue haciéndolo!
Es un buen hábito a desarrollar.
El desorden bloquea el flujo de energía y también impide que te lleguen riquezas y dinero.
Ordena tu espacio vital en cuanto puedas, crea un lugar para tus posesiones y asegúrate de que permanece ordenado.
Según algunos teóricos de la psicología, tu espacio vital es un reflejo de tu mente.
Cuanto más ordenadas estén tus habitaciones, ¡más despejada estará tu mente!
Consejo nº 2: Al Feng Shui le encanta el vacío
Contrariamente a la afirmación del famoso filósofo griego Aristóteles: «¡La naturaleza aborrece el vacío!».
¡Al Feng Shui le encantan los espacios vacíos!
Es mejor que al menos algunas de tus habitaciones estén poco amuebladas, para favorecer la circulación del Chi.
Hay una buena razón por la que las casas o habitaciones se «cargan» demasiado de energía negativa.
Cuando hay espacios vacíos en tu vivienda, la energía universal beneficiosa o Chi puede fluir libremente y difundir sus múltiples beneficios. Si sigues el consejo nº 1 y pones orden en tu vivienda, también estarás creando espacios vacíos al mismo tiempo.
Un consejo: deshazte de las cosas rotas o inútiles que no te gusten.
Te ayudará a crear espacios vacíos más rápidamente.
Consejo nº 3: Aire y luz
Intenta vivir en una vivienda que tenga el máximo de aberturas, incluidas ventanas y puertas, para dejar entrar la mayor cantidad posible de aire y luz.
Las habitaciones demasiado oscuras y/o mal ventiladas no permiten que circule la energía Chi en las mejores condiciones.
Deja las ventanas abiertas siempre que sea posible.
Si vives en un barrio ruidoso, ábrelas por la noche.
Si fuera hace frío, ponte un jersey y abre las ventanas al menos media hora al día.
Eso será suficiente para que el Chi circule por tu domicilio (¡y ahorrarás un poco de dinero en la factura de la calefacción!).
Al mismo tiempo, o si no te es posible abrir las ventanas con regularidad, utiliza un purificador de aire, un difusor de aceites esenciales o simplemente ten muchas plantas.
Las plantas no sólo absorbenCO2 y lo transforman en oxígeno, sino que también purifican el ambiente de energía negativa y atraen la abundancia.
En cuanto a la luz, opta por habitaciones con grandes ventanas que dejen entrar toda la energía luminosa posible.
Si no tienes muchas ventanas que dejen entrar la luz en tu espacio vital, utiliza lámparas que emitan una luz suave y difusa, y evita las fuentes más violentas, como los neones o los focos.
Lo mejor son las bombillas LED, y también las velas, que emiten un suave resplandor.
Consejo nº 4: Una fuente de juventud
En la filosofía del Feng Shui, el agua simboliza la riqueza.
¡Imagina tener una fuente de agua dulce en tu casa que no deje de arrojar dinero a tu vida!
Encontrarás los mejores precios disponibles, y tus inversiones serán extremadamente rentables desde el punto de vista del Feng Shui.
Puedes comprar una fuente barata en la ferretería de tu barrio y colocarla cerca de la entrada de tu casa o, si vives en un apartamento, cerca de la puerta principal.
Las puertas tienen un significado simbólico, ya que es a través de ellas por donde entras en tu casa, y a través de ellas, por donde pueden penetrar simbólicamente las riquezas.
Por eso el agua debe fluir siempre hacia el interior.
