Otoño – Revolucionario y Volátil

Una compleja Carta del Equinoccio de Otoño para tiempos complejos…

La última temporada del año, el último trimestre, ha comenzado. 2021 ya ha sido agitado y dramático, pero es muy posible que los próximos 3 meses hagan que los 9 anteriores parezcan los tres periodos que conducen a la prórroga en los playoffs. Y, sin embargo, también resultarán perturbadores y confusos, sobre todo a medida que avancemos hacia octubre y tras la culminante Luna Nueva en Libra que tendrá lugar el 6 de octubre.

El Equinoccio de Otoño se produce oficialmente el 22 de septiembre a las 15:21 h EDT de este año. Más allá de marcar el cambio de estación, cuando las horas del día y de la noche se igualan, el momento exacto en que el Sol entra en un Signo Cardinal, en este caso Libra, presenta una vista previa fractal de los temas centrales destinados a desarrollarse durante los próximos 3 meses. Este retrato ofrece una valiosa comprensión para la predicción y las profecías, para las influencias destinadas que nos afectarán a todos colectivamente.

Libra es el signo de la armonía y el equilibrio en las relaciones, y de los retos para realizar este ideal. También se refiere a temas de equidad y justicia. Todo lo anterior está sujeto a cambios dinámicos asociados al hecho de que todos los aspectos de la existencia, desde lo molecular a lo cósmico, están siempre en movimiento cíclico. En este sentido, la clave del equilibrio es mantenerse en sintonía con la dinámica siempre cambiante.

Cabe mencionar que la Luna Llena en Piscis, que fue exacta el 20 de septiembre, estará en su fase menguante en el momento del equinoccio, prestando su influencia específica que implica un proceso de ser fiel al propio sentido de autenticidad como individuo. La influencia de Piscis implica específicamente sentimientos espirituales y realización en el lado alto, pero decepción de uno mismo y de los demás y negación, en el lado bajo.

Sin embargo, hay que señalar claramente que la FASE de Luna Llena dura unos 3,5 días después del apogeo exacto de la Luna Llena. Así pues, la carta trazada para este momento exacto del Equinoccio de Otoño revela la Luna Llena en Aries, que es una colocación altamente reactiva y a menudo volátil para la Luna. Puesto que la Luna simboliza a las masas o el «estado de ánimo colectivo» o el tono y tenor de los movimientos colectivos, prepárate para una ronda de reacciones extremadamente dramáticas y volátiles por parte del público.

Marte, que simboliza el «verbo» en cualquier frase y en todas sus formas, es el planeta regente de Aries, donde está la Luna, y con Marte en Libra, que es en sí mismo un emplazamiento complejo para la acción, la afirmación y la agresión, podemos esperar una confrontación dinámica de bandos que lanzan ataques alternativamente y, a veces, simultáneamente. En resumen, la guerra silenciosa está a punto de volverse mucho más ruidosa y agresiva.

Venus es el regente de Libra y, mientras tanto, está en Escorpio en la carta del Equinoccio de Otoño, que también es una colocación compleja para Venus. Esta combinación de complejidad entre los amantes celestes revela la trama del deseo, la ambición y las maniobras psicológicas apoyadas por un encanto seductor. Aunque Venus y Marte están en recepción mutua, lo que sirve para añadir gracia a sus respectivas expresiones en estos signos, también puede manifestarse como grados aún mayores de astucia y destreza engañosa.

Mercurio en Libra, orientado a la justicia y la equidad, en estrecha oposición a la Luna en la carta del Equinoccio, y tanto Mercurio como la Luna Llena formando un ángulo exacto de 90 grados con Plutón, contribuyen significativamente a la complejidad de esta trama. Se trata de un potente patrón de aspectos llamado Cuadratura en T, que está muy cargado y determinado hasta el punto de la agresión. Con Plutón en el vértice, este tema de la agresión puede manifestarse como despiadado. Plutón en Capricornio, la autoridad gubernamental, sugiere la continuación de medidas de mano dura por parte de las autoridades gubernamentales.

Júpiter y Saturno, los dos planetas «sociales», ambos en Acuario, están bastante armonizados en sus aspectos, apoyando un proceso de despertar derivado de la guerra de la información. Urano, el planeta regente moderno de Acuario, en Tauro y en oposición exacta de 180 grados a Venus en Escorpio, es el indicio más ruidoso que revela que gran parte de la intriga y complejidad de nuestro tiempo está directamente relacionada con lo que generalmente se considera el «gran reseteo económico». Aunque potencialmente es un tema positivo, viene aderezado con elementos ocultos decididos a adueñarse del tablero del monopolio mundial de una vez por todas. Espera que un tira y afloja sin precedentes entre los poderes ocultos y las poblaciones masivas del mundo alcance nuevas cotas.

Neptuno en Piscis todo el tiempo es técnicamente «inesperado», produciendo un efecto comodín, planteando un reto respecto a cómo ayudar a la gente a salir de la negación inducida por el trance.

2021 pasará a los libros de historia como la fase 2 de una iniciación global, mientras que 2020 marcará la fase 1 y se recordará que el verdadero periodo de ignición ocurrió en otoño. Esta iniciación se refiere a que el mundo entero se unificará de forma común debido a que todos los lugares del planeta se enfrentan al mismo problema.

Generalmente, esta última estación del año revela temas de activación espiritual, en el lado elevado. Sin embargo, en el negativo, se manifestará como temas de carencia física, emocional y espiritual y como temores de separación de uno mismo, de los demás y de la fuente, en general. Así, las victorias espirituales sugeridas se manifestarán como la otra cara de una noche oscura colectiva del alma.

Metafóricamente, imagina que estás en una gran reunión en un lugar cerrado y está muy oscuro fuera, de repente las luces se apagan por completo durante varios minutos y luego, igual de repentinamente, se encienden de nuevo con todos los focos también, causando algo así como un efecto cegador y asombroso que trastorna toda tu mentalidad, percepción y actitud previas al acontecimiento. Añade a esto que algo significativo que había antes en la sala, como la mesa principal, ya no estaba allí. Será interesante ver cómo se manifiesta esta metáfora en forma de diversas sincronicidades externas.

Desde un punto de vista más amplio, es el amanecer de la Era de Acuario lo que está produciendo un cambio tan masivo, y apenas ha terminado aún. Con la entrada de Plutón, el planeta de la transformación, en Acuario el 23 de marzo de 2023, se activará un ciclo de 20 años que probablemente «cerrará el trato».

La última vez que Plutón entró en Acuario fue el 4 de abril de 1777, el periodo de la Revolución Americana. Así pues, a modo de semblanza paralela, 2021 simboliza la acumulación de energías que culminó en la Guerra de la Independencia.