Hazte Intuitivo: Consejos y herramientas para fortalecer tu intuición

Todos conocemos esa sensación que nos invade cuando podemos intuir que algo está bien o mal.
¿O qué me dices de esas veces en las que parece que conoce algo sin tener ningún dato que lo respalde?
Todo el mundo tiene historias sobre momentos cruciales en los que no escucharon a su intuición, pero ¿qué pasaría si empezaras a escuchar más a tu intuición?
Empieza a fortalecer tu intuición ahora…

En este artículo vamos a hablar de los ejercicios de entrenamiento que puedes hacer para fortalecer tu intuición y aprender a vivir una vida más intuitiva.

¿Por qué debes reforzar tu intuición?

Piensa en la última vez que tuviste que tomar una decisión importante.
Probablemente te encontraste yendo y viniendo entre las opciones, intentando sopesar cuál era la mejor elección.
Pediste consejo a tus amigos, pero seguías sin saber cómo avanzar, deseando poder saber con certeza qué opción era la correcta.
Pues bien, esa decisión habría sido mucho más fácil de tomar si hubieras tenido un sentido de la intuición más fuerte. Tu intuición es tu sentido natural de saber y percibir, así que cuando ese músculo es fuerte te vuelves menos indeciso y más seguro.
Suena genial, ¿verdad?

Levantar demasiado peso

Los novatos suelen cometer este gran error: intentar levantar demasiado peso.
Piensa en ir al gimnasio por primera vez y coger las mancuernas de 50 libras, pensando que podrías intentar levantarlas con los hombros por encima de tu cabeza.
No puedes, porque los pesos tan pesados hay que trabajarlos, empezando con pesos más pequeños y subiendo hasta los más pesados.
Lo mismo ocurre con la intuición.
No puedes esperar ser capaz de tomar una decisión intuitiva sobre si mudarte o no al otro lado del país si antes no has estado utilizando tu intuición de formas cotidianas más pequeñas.

Intuición o ansiedad

Quizá estés pensando: «¿cómo diferencio la intuición de la ansiedad?».
Es una gran pregunta.
Uno de los mayores obstáculos a los que se enfrenta la gente cuando empieza a trabajar con su intuición es la ansiedad.
La ansiedad puede ser algo insidioso que incluso puede despistar a personas que tienen un fuerte sentido de la intuición.
Tanto la intuición como la ansiedad se manifiestan a menudo como un monólogo interior, pero una procede del miedo y la otra es algo más espiritual, así que ¿cómo podemos distinguirlas?
La respuesta breve es que la intuición es silenciosa y suele ser breve, mientras que la ansiedad es ruidosa y persistente.
La intuición es más como una ráfaga de viento que baila a tu alrededor y luego se disipa, y la ansiedad es un aguacero torrencial.
Cuanto más flexiones el músculo de tu intuición, más capaz serás de distinguir la diferencia, pero incluso los intuitivos más hábiles pueden verse atrapados en una espiral de ansiedad, así que ¿qué hacer cuando eso ocurre?
La respuesta es sencilla: confía en ti mismo.
La base de todo trabajo de intuición es aprender a confiar en ti mismo, porque la intuición es la voz que acude primero a tu mente cada vez que te enfrentas a una decisión.
Cuando aprendas a confiar en esa voz en el momento en que hable, estarás trabajando activamente contra la ansiedad, que es la voz que viene después.
Cuando me veo incapaz de discernir entre la intuición y la ansiedad, simplemente elijo, porque confío en mí misma y sé que, pase lo que pase, puedo manejarlo.
Cuando nos quitamos la presión de discernir entre ambas cosas, ¡en realidad estamos reforzando nuestra intuición!

Cómo fortalecer tu intuición

Aquí tienes un par de mis métodos probados y verdaderos para fortalecer el músculo de tu intuición.
Pruébalos todos y comprueba qué te funciona. Cómo desarrollar tu intuición

Viajes intuitivos

Para esta actividad me suele gustar dar un paseo, pero puedes montar en bici o en monopatín, o incluso subirte a tu coche para dar un relajante paseo en coche.
Cuando des tu paseo o conduzcas, haz todo lo posible por despejar tu mente, sobre todo cuando te acerques a un paso de peatones o a un semáforo.
Escucha tu intuición, te dirá que vayas a la derecha, a la izquierda o hacia delante, y tu trabajo consiste en escuchar las indicaciones y seguirlas adonde te lleven.
Haz todo lo posible por no planificar en absoluto tu paseo, cuanto más te permitas tomar esa decisión precipitada, más fuerte estará trabajando tu intuición.

Días intuitivos

Tomas muchas decisiones cada día, desde qué taza de café utilizar, qué camino tomar para ir al trabajo, si hacer ejercicio o no, etc.
Elige un día de la semana, cada semana, para tomar todas tus decisiones basándote en la intuición.
Esto requiere que te rindas, seas decisivo y confíes en el proceso.
Ésta es una de las mejores herramientas que puedes utilizar para fortalecer tu intuición, porque cuanto más practiques la toma de decisiones intuitivas en las cosas pequeñas, mejor podrás utilizar tu intuición cuando se trate de las decisiones más importantes que tengas que tomar en la vida.

Arte intuitivo

El arte es un acto intuitivo.
Todos hemos oído hablar de artistas que sufren un bloqueo creativo (algunos de nosotros también lo hemos sufrido), pero en el lado opuesto se encuentra el estado de flujo artístico que surge cuando eres capaz de crear una relación sólida con tu intuición.
Sin embargo, no necesitas ser un gran artista para aprovechar los beneficios de esta práctica, todo lo que necesitas es un bolígrafo o un lápiz, papel y tu intuición.
Empieza a garabatear lo que te venga a la mente y sigue garabateando hasta que llenes toda la página.
Puede ser tan sencillo como dibujar líneas y puntos, o más intrincado como flores y personas; la cuestión es que no intentes planificar lo que vas a garabatear a continuación.
En lugar de eso, deja que tu mente esté presente y, cuando llegue el momento de garabatear algo nuevo en la página, haz lo primero que te venga a la cabeza.
También es una práctica excelente para aprender a no juzgarse a uno mismo.
Confía en el proceso y te sorprenderá lo bien que queda todo cuando hayas cubierto una página entera de garabatos intuitivos.
Sigue leyendo: Desarrollar la intuición para trabajar con cristales