28 septiembre 2024
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Göbekli Tepe: ¿Antiguos orígenes de los signos del zodíaco?

Göbekli Tepe: ¿Antiguos orígenes de los signos del zodíaco?

El antiguo origen de los signos del zodiaco es uno de los grandes misterios del mundo.
Parece que cada vez que tiramos de un nuevo hilo de conocimiento sobre este tema, nuestras viejas teorías empiezan a desentrañarse y surgen otras nuevas.
Aunque una nueva teoría puede convertirse en el paradigma predominante durante un tiempo, a menudo es finalmente sustituida tras otro descubrimiento apasionante.
Con la historia de los signos del zodiaco, estamos tratando con historia verdaderamente antigua, por lo que es difícil de rastrear, pero el reto es lo que lo hace divertido.
Cada nuevo descubrimiento lo hace más emocionante.

La Historia enseñada en la escuela frente al mundo real

Los libros de texto para escolares suelen representar los acontecimientos históricos en una línea temporal estática.
A los niños se les enseñan ciertos hechos en esta línea temporal como inmutables y tienen que recitarlos exactamente como se les enseñó si quieren un sobresaliente del profesor.
El mundo real es mucho más confuso.
Es borroso.
Es difuso en los bordes.
El conocimiento histórico nunca es estático, fluye y se retuerce.
El «principio» se sustituye a menudo por un nuevo principio.
Y… hay mucho misterio en la historia.
Si eres un buscador de la verdad, saber esto te servirá más que cualquier lección de historia estática que hayas aprendido en la escuela.
¡Prepárate siempre para acabar con el dogma!
Supón que le preguntas a tu amiga, a la que le gusta mucho la astrología: «¿Quién inventó los signos del zodiaco?».
Puede que te responda: «Los griegos, claro… ellos inventaron todo eso».
Puede que tu amiga incluso te diga que la palabra «zodiaco» es una palabra griega que significa «círculo de animales».
Puede que incluso te golpees la mano en la frente en ese momento y digas: «Oh, claro… Debería haberlo sabido».

Pero, ¿tenía realmente razón tu amiga aficionada a la astrología?
Esto es lo que puede haber leído en múltiples fuentes, pero no, en realidad no.
Supongamos que tu amigo y tú decidís visitar juntos a un astrólogo profesional.
En el transcurso de la conversación, puede que digas: «Mi amiga me acaba de enseñar que los griegos inventaron los signos del zodiaco… qué guay».
Puede que en ese momento ella corrija amablemente el disco y os informe a los dos de que, en realidad, los griegos lo aprendieron de los egipcios (y probablemente de los fenicios), que a su vez lo aprendieron de los babilonios.
Puede que entonces te entusiasme compartir tus nuevos conocimientos con los cerebritos de tu club de lectura.
Encuentras la forma de deslizar estos datos sobre la historia antigua en la conversación.
Un profesor de historia del grupo señala que los libros de texto no se remontan lo bastante atrás, y que en realidad fueron los sumerios quienes desarrollaron por primera vez los signos del zodiaco.
Entonces un arqueólogo del grupo dice: «Bueno, en realidad ahora creemos que se remonta más atrás… ¡mucho más atrás!».
La profesora de historia pone cara de asombro.
Se inclina hacia delante y dice: «¡Cuéntame más!».
Sí, querido profesor, por favor, cuéntanos más.

¿Qué es Göbekli Tepe y por qué es tan especial?

Göbekli Tepe es sin duda uno de los descubrimientos arqueológicos más asombrosos jamás realizados.
Se descubrió, o más bien se redescubrió, en el sur de Turquía, cerca de la frontera con Siria, en 1994.
En realidad, fue visto por primera vez décadas antes, pero se consideró «sólo» un enterramiento de la época medieval y no una gran prioridad arqueológica, por lo que no se exploró más profundamente bajo las capas superiores.
Sin embargo, Göbekli Tepe resulta ser mucho más que eso y significativo para toda nuestra comprensión de cómo empezó realmente la civilización.
Göbekli Tepe resulta ser el más grandioso de los grandes templos en cuanto a tamaño, complejidad y uso aparente.
Tiene al menos doscientos pilares macizos en forma de T dispuestos en veinte o más círculos u óvalos.
Estos pilares pesaban hasta diez toneladas y alcanzaban los seis metros de altura.
Estaban encajados con precisión en la roca del suelo.
¡Presentaban tallas y grabados exquisitamente intrincados!
Spoiler alert: tras un cuidadoso estudio por parte de equipos académicos, estas tallas y grabados parecen representar con gran precisión constelaciones, planetas y otras características que se habrían visto visibles en el cielo nocturno de aquella época en ese lugar exacto.
Y… las tallas y grabados muestran evidencias de una comprensión de los signos zodiacales y la astrología.
Pero aún hay más… ¡este asombroso templo NO se construyó en la época medieval!
¡Se construyó mucho antes!
¡¡El yacimiento está datado por radiocarbono en unos diez mil años a.C.!!
Esta datación, junto con otras pruebas, demuestra que este gran templo fue construido por cazadores y recolectores, ¡no por agricultores ni por personas que vivían en ciudades centradas en la agricultura!
El análisis de los huesos de los animales comidos en los festines ceremoniales y enterrados en fosas, así como de los utensilios utilizados para limpiar y cocinar la carne, demuestra claramente que se trataba de animales salvajes que vivían en los alrededores.
Los cazadores y recolectores los cazaban y luego los llevaban al yacimiento.
El arqueólogo que redescubrió el yacimiento y reconoció su importancia llamó al conjunto de huesos un «zoo de la Edad de Piedra».

El descubrimiento de Göbekli Tepe ha hecho que los historiadores y arqueólogos se replanteen por completo lo que durante mucho tiempo habían considerado cierto.
Pensaban que la práctica de la agricultura reunía a la gente en unidades cohesionadas (las primeras ciudades) y LUEGO se construían templos, lugares de culto.
De hecho, ningún académico había imaginado siquiera, al menos profesionalmente, que un templo tan complejo pudiera haber sido construido por cazadores y recolectores.
Los académicos siempre habían supuesto que haría falta la formación de la civilización, es decir, ciudades agrícolas, para construir algo así.
Algunos se plantean ahora la idea de que los cazadores y recolectores vivían parte del año en pequeñas aldeas o ciudades.
Göbekli Tepe parece haber sido un lugar de encuentro donde se reunía mucha gente en días astrológicamente significativos, como los solsticios de verano e invierno y los equinoccios de primavera y otoño.
Parecía haber una combinación de actividades serias y algunas celebraciones.
Göbekli Tepe es ahora Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, como debe ser.

Conclusiones del signo del zodiaco

¿Inventó Göbekli Tepe los signos del zodiaco?
Tal vez.
Desde luego, parece que los pilares de Göbekli Tepe se utilizaron probablemente para seguir la pista de los objetos celestes en el cielo.
Hay grabados detallados de un león, un escorpión y un toro, que corresponden a los signos zodiacales de Leo, Escorpio y Tauro.
Hay otras pistas en los grabados que apuntan a que estas tallas sirven de signos zodiacales.
Otras tallas pueden representar también los signos del zodíaco, incluido el 13º signo zodiacal.
Todo esto significa que los orígenes de los signos del zodiaco se remontan mucho más atrás de lo que nadie había imaginado antes.
Y… si los cazadores y recolectores ya estaban tan avanzados en su perspicacia astrológica diez mil años antes de Cristo, cabe preguntarse cuánto tendremos que remontarnos para encontrar los verdaderos orígenes de los signos del zodiaco y la astrología.
He aquí una idea descabellada.
Muchos académicos piensan ahora que los neandertales aún se mezclaban con nuestros humanos cazadores y recolectores veinte mil años a.C. ¿Podrían haber desarrollado los primeros signos del zodiaco y habérselo enseñado a los humanos?