25 noviembre 2024
Horóscopo Gratis
Ask Astrology
El modelo de los cinco grandes rasgos de la personalidad

El modelo de los cinco grandes rasgos de la personalidad

El sistema de Rasgos de Personalidad es un modelo científico que traza un mapa de la psicología humana.
Este sistema descompone la personalidad humana en cinco rasgos esenciales de personalidad, cada uno de los cuales tiene dos aspectos.
Cada individuo posee cada uno de estos cinco rasgos en alguna medida; puede ser muy alto, muy bajo o moderado en un rasgo determinado.

Cada rasgo y aspecto de la personalidad tiene ventajas e inconvenientes.
Cualquier rasgo en exceso tiene dones positivos que ofrecer, así como sus desventajas, y lo mismo ocurre con tener un rasgo en un déficit extremo.

La combinación de todos estos rasgos en distintas proporciones conforma tu estructura de personalidad única, y comprender esta estructura puede ayudarte a entender lo que necesitas en las relaciones, el trabajo y el estilo de vida para sentirte sano, feliz, productivo y realizado.

Agradabilidad: Compasión y cortesía

La amabilidad es la dimensión principal de la interacción interpersonal.
La compasión y la cortesía son dos aspectos de la amabilidad.

Las personas con un alto grado de simpatía son agradables, complacientes, cariñosas, amables, indulgentes, ingenuas, confiadas y conciliadoras.
Buscan lo mejor en los demás, y son ampliamente aceptadoras, inclusivas, cooperativas, flexibles y tolerantes.
Valoran la paz, la armonía y la compasión, y se preocupan mucho por los sentimientos de los demás.

Debido a su tendencia a evitar los conflictos, las personas agradables suelen disimular y ocultar lo que piensan.
Suelen sacrificar la estabilidad y el funcionamiento a largo plazo para evitar «alterar el carro de la manzana» o hacer algo que pueda perturbar su conexión con otras personas.
Por ello, las personas muy agradables suelen albergar resentimiento tácito, celos, culpa y cierta «mentalidad de víctima».

Las personas poco agradables pueden ser poco amables.
Son obstinadas, dominantes, duras, escépticas, competitivas y, en el extremo, incluso depredadoras.
Los demás los consideran algo competitivos, más fríos y menos empáticos, y no son especialmente indulgentes, aceptadores, amables o pacientes.

Sin embargo, los menos agradables suelen ser directos y francos, por lo que sabes cuál es su postura y puedes tomarles la palabra.
Suelen ser buenas abogando por sí mismas y negociando para conseguir más influencia, dinero, reconocimiento o poder.
Debido a su capacidad para entrar en conflicto cuando es necesario, las personas desagradables tienden a no sacrificar la estabilidad y el funcionamiento a largo plazo en aras de la paz a corto plazo.
Son capaces de resolver los problemas del presente de forma inmediata y directa, y por ello, las personas menos agradables son menos propensas a sufrir resentimiento, celos o a albergar ira invisible.

Conciencia: Laboriosidad y Orden

La concienciación es la principal dimensión de la realización obediente.
La laboriosidad y el orden son dos aspectos de la conciencia.

La concienciación es una medida de la obligación, la atención al detalle, el trabajo duro, la persistencia, la limpieza, la eficacia y el cumplimiento de reglas, normas y procesos.

Las personas con un alto nivel de conciencia son cumplidoras.
Trabajan duro hasta que el trabajo está hecho y no les gusta perder el tiempo.
Es poco probable que pospongan las cosas.
Si una persona muy concienzuda promete hacer algo, probablemente lo hará, incluso en circunstancias difíciles, sin excusas.
Son decididas, ordenadas, organizadas, orientadas al futuro, fiables y no se distraen fácilmente.

Las personas menos concienzudas tienden a procrastinar, poner excusas y «escamotear».
Puede que no les guste la sensación de estar bajo presión para entregar un producto final o cumplir un plazo, y no les motiva la necesidad de sentirse útiles, productivas u ocupadas.
Pueden encontrar más valor en estados de ser o relacionarse que en estados de hacer o completar. Y son más felices en entornos que no exigen resultados, plazos o compromiso.

Sigue leyendo sobre el Modelo de los Cinco Grandes Rasgos de Personalidad…

Extraversión: Entusiasmo y Asertividad

La extraversión es la dimensión principal de la emoción positiva.
Este rasgo de personalidad tiene dos aspectos: Entusiasmo y Asertividad.

La extraversión es una medida de la sensibilidad general a las emociones positivas, como la esperanza, la alegría, la anticipación y el acercamiento, sobre todo en situaciones sociales.

Las personas con niveles muy altos de extraversión son muy entusiastas, habladoras, asertivas en situaciones sociales y gregarias.
El contacto social les da mucha energía y lo anhelan.
Disfrutan organizando fiestas, contando chistes, haciendo reír y participando en actividades comunitarias.

Los individuos con un bajo nivel de extraversión son retraídos, reservados y más difíciles de conocer.
Prefieren pasar tiempo solos que rodeados de otras personas.
Suelen mantener a la gente a distancia, y la estimulación y la actividad de los compromisos sociales pueden resultarles agotadoras.

Neuroticismo: Retraimiento y Volatilidad

El Neuroticismo es la dimensión principal de la emoción negativa.
Este rasgo de personalidad tiene dos aspectos: Retraimiento y Volatilidad.

El neuroticismo es una medida de la sensibilidad general a las emociones negativas, como el dolor, la tristeza, la ira irritable o defensiva, el miedo y la ansiedad.

Las personas con un alto nivel de neuroticismo son propensas a la ansiedad, la depresión, la culpa y el pesimismo.
Tienden a ver las cosas a través de una lente negativa que les hace sentirse nerviosos, indignos, víctimas o desesperanzados.
Cuando les ocurren cosas buenas, las personas con altos niveles de neuroticismo tienden a cuestionarse si se lo merecían o no.
O «esperar a que caiga el otro zapato».
Las personas neuróticas no toleran el estrés, el fracaso, los contratiempos, los desacuerdos, la presión y el riesgo.
Tienden a preocuparse más por la salud, a visitar más al médico y a dar más parte de enfermo.

Las personas con bajos niveles de neuroticismo rara vez se centran en los elementos negativos, las ansiedades y las incertidumbres del pasado, el presente y el futuro.
Es raro que afronten periodos de tiempo en los que se sientan infelices, ansiosos e irritables, a menos que se enfrenten a un problema grave y sostenido.
Incluso en estas últimas condiciones, lo afrontan bien, no se preocupan demasiado y se recuperan rápidamente cuando están estresados.
Se les da bien mantener la cabeza en la tormenta, y pueden manejar el riesgo sin preocuparse excesivamente.
Rara vez les preocupa la seguridad, y pueden manejar más fácilmente situaciones recreativas, profesionales, financieras y sociales en las que la posibilidad de pérdida es mayor.

Apertura a la Experiencia: Apertura e intelecto

La apertura a la experiencia es la dimensión principal de la creatividad, el interés artístico y la inteligencia, en particular la inteligencia verbal.
Hay dos aspectos de la Apertura a la Experiencia: La Apertura y el Intelecto.

La apertura a la experiencia es una medida del interés por la novedad, el arte, la literatura, el pensamiento abstracto, la filosofía, así como la sensibilidad a las emociones estéticas y a la belleza.

Las personas con altos niveles de apertura a la experiencia casi siempre son caracterizadas por los demás como listas, creativas, exploradoras, inteligentes y visionarias.
Están extremadamente interesadas en aprender, y adquieren constantemente nuevas habilidades y destrezas, son extremadamente curiosas y exploradoras.
Les interesa excepcionalmente el pensamiento abstracto, la filosofía y el significado de los sistemas de creencias e ideologías.
Les encanta asistir a actos culturales.
Esto incluye disfrutar de películas, conciertos, recitales de danza, obras de teatro, recitales de poesía, inauguraciones de galerías y exposiciones de arte.
Es muy probable que disfruten escribiendo (o incluso que se sientan impulsados a escribir).
Disfrutan con las ideas complejas y abstractas y les encanta enfrentarse a problemas complejos, abstractos y multidimensionales, y resolverlos.