Utilizar la Regresión a Vidas Pasadas para Resolver Problemas de la Vida Presente

Muchas veces y de muchas maneras en la vida nos enfrentamos a problemas importantes.
Algunos de los problemas tendrán causas y soluciones obvias, pero otros puede que no.
Los que nos resultan misteriosos pueden, en realidad, tener un origen en vidas pasadas que nos obligue a utilizar la regresión a vidas pasadas para encontrar y resolver el problema, o, al menos, ponernos en el camino para resolverlo.
Aquí te explicamos cómo Utilizar la Regresión a Vidas Pasadas para Resolver Problemas de la Vida Presente.

Ejemplo personal: Miedo al océano

Desde que tengo uso de razón, he tenido casi fobia al mar, no a todas las masas de agua, sólo al mar.
Nadar, en lagos o piscinas, nunca fue un problema.
La psicología moderna sugeriría, con razón, que algún tipo de mala experiencia, sugestión temerosa (como ver la película Tiburón a una edad temprana) o trauma compartido por un ser querido podría ser una clara fuente vital presente de mi miedo.
Pero no experimenté nada de eso.
Sólo más tarde, cuando ya era adulta y exploraba cuestiones espirituales, me topé con la regresión a vidas pasadas y la técnica de hipnoterapia utilizada para explorar la vida pasada de una persona.
Encontré a una practicante en Asheville, Carolina del Norte, y fui a visitarla para una de sus sesiones, que duraban entre 3 y 4 horas.
Cuando nos conocimos, me preguntó si había algún tema sobre el que quisiera saber algo y le hablé de mi miedo al océano.
Me dijo que podíamos utilizar eso como intención de la sesión, ante todo para averiguar si el miedo tenía sus raíces en una vida pasada.

Utilizar la Regresión a Vidas Pasadas para Resolver Problemas de la Vida Presente

Una vez en estado hipnótico, me preguntó: «¿tu miedo al océano procede de una vida pasada?».
A lo que respondí: «sí».
Entonces fuimos a explorar en busca de la vida pasada concreta, que resultó ser hace 1500 años en la India, a lo largo de la costa del océano Índico.
En aquella vida pasada, yo era sacerdote de una aldea mediana de la costa.
Durante mi estancia allí, se declaró una enfermedad que mataba a la gente a gran velocidad.
También era padre de una hija.
Temiendo por su vida, decidí enviarla con mi familia, sabiendo que era muy probable que no volviera a verla.
Resultó que sobreviví a la enfermedad, pero todos los habitantes del pueblo murieron o huyeron.
Llegó un momento en que me sentí sola y abrumada por la muerte y la pérdida de mi hija, que podría haber sobrevivido a la enfermedad si se hubiera quedado conmigo.
En el punto más bajo, nadé hasta el océano y me dejé ahogar.
La hipnoterapeuta con la que trabajé era muy hábil y una guía excelente, que se adentraba conmigo en la vida pasada y me mantenía anclada en el momento presente.
Me preguntó si quería observar lo ocurrido o volver a experimentarlo; elegí observar, pero no volver a experimentar mi muerte.
Cuando salí del estado hipnótico, sentí que el miedo al océano había desaparecido.
Y la siguiente vez que visité la costa, no tuve la ansiedad que surgía cada vez que miraba al océano.

El Proceso de Regresión a Vidas Pasadas

El proceso más habitual para explorar una vida pasada es la hipnoterapia.
Una sesión de regresión a vidas pasadas puede durar entre tres y seis horas, y debe realizarse con un hipnoterapeuta formado profesionalmente.
Siempre es importante saber que la hipnoterapia es una actividad consciente/semiconsciente que NO te quita ningún control.
Sí te ayuda a alcanzar un estado en el que te permites estar abierto y llegar a la información a la que normalmente no podrías acceder con tu ego-mente.
He hecho más de siete regresiones por distintos motivos, algunas para abordar problemas como mi miedo al océano y otras para comprender relaciones importantes de mi vida, como la que tengo con mi padre, que ha resultado ser una conexión del alma que se repite, en la que, curiosamente, siempre hemos sido padre e hijo, siendo él mi padre.
Un hipnoterapeuta profesional bien formado cobrará entre 300 y 600 $, dependiendo del tema o temas que quieras tratar.
La confianza es un componente clave del proceso de regresión, al igual que la voluntad de estar abierto al proceso de hipnosis.
Puede que descubras que entras fácilmente en el estado hipnótico o que permaneces muy cerca de la superficie consciente, incluso con la voluntad de ser hipnotizado.
Yo soy resistente por naturaleza, por lo que permanezco consciente de mi entorno y del terapeuta en todo momento, pero aún así puedo acceder a información de vidas pasadas, que me llega más en forma de recuerdos que estando en la experiencia, lo que puede ocurrir si eres capaz de profundizar en el proceso.

Ayudar con un problema o resolver un problema

A veces, un problema de la vida presente es el resultado de un problema importante de la vida pasada que puede ayudar, pero no resolverse totalmente con el trabajo de regresión, sobre todo si sólo utilizas una regresión para tratar un problema importante.
Mi regresión sobre el miedo al océano me ayudó a identificar el porqué y el cuándo del problema, y a aliviar lo que se consideraría un miedo «irracional» al océano.
No me hizo querer convertirme en pescador ni trabajar en un crucero.
Me he enfrentado a temas y problemas recurrentes relacionados con determinadas relaciones y con mi papel en la vida, como maestra y consejera espiritual, que he explorado con otras cuatro de las regresiones que he hecho, cada una de las cuales me ha ayudado a avanzar.
Si tienes un problema presente, pero no tienes un origen claro en la vida presente, considera la posibilidad de utilizar la regresión a vidas pasadas para encontrar una respuesta y trabajar en una solución.

Para más consejos sobre mindfulness:

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