22 noviembre 2024
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Un momento poderoso para Leo: la lluvia de meteoros de las Leónidas

Un momento poderoso para Leo: la lluvia de meteoros de las Leónidas

La lluvia anual de meteoros de las Leónidas alcanzará su punto álgido este mes de noviembre, los días 17 y 18, y será visible en todo el mundo. Esta feroz lluvia de meteoritos tiene lugar en la constelación de Leo, por lo que va a ser una poderosa activación para encender la pasión y la creatividad en tu vida. Sigue leyendo para ver qué significa para ti esta lluvia de meteoritos y cómo trabajar con ella en función de tu signo ascendente.

¿Qué es una lluvia de meteoritos?

Los meteoritos son pequeños trozos de polvo y residuos espaciales que caen a gran velocidad a través de la atmósfera de nuestro planeta. Como estos trocitos del espacio caen tan deprisa, dejan tras de sí brillantes estelas de luz centelleante que pueden observarse -a menudo a simple vista- desde aquí en la Tierra. Lo interesante es que estos acontecimientos celestes no son aleatorios, sino que podemos ver estos deslumbrantes espectáculos de luz todos los años más o menos en la misma época. Esto se debe a que la Tierra realiza su rotación anual alrededor de todas las estrellas, y al hacerlo pasa por las constelaciones y los meteoros.

Las Leónidas y la Constelación de Leo

Las constelaciones en sí no son las que lanzan los meteoros de las lluvias anuales, pero los humanos llevan milenios utilizando las estrellas del cielo nocturno como mapa para seguir el movimiento de los cuerpos celestes. Así pues, ¡la lluvia de meteoros de las Leónidas siempre tiene lugar en la parte de nuestro cielo nocturno donde vemos la constelación de Leo! Leo es el 2º signo de fuego del zodiaco y tradicionalmente cae justo en pleno verano (o invierno si estás en el hemisferio sur), lo que lo convierte en un signo de fuego fijo. Leo está regido por el sol y representado por el león, por lo que las cualidades comunes atribuidas a este signo son la creatividad, el corazón, la pasión, la lealtad y la vivacidad. Así pues, mientras caen meteoros e iluminan esta ardiente constelación, es el momento perfecto para revisar nuestro propio león y leonas interiores. Sin embargo, las constelaciones están mucho, mucho más lejos que la lluvia de meteoros de las Leónidas (énfasis en «mucho«); las brillantes rayas de luz resplandeciente que verás a mediados de noviembre de esta lluvia proceden del cometa Temple-Tuttle. Este cometa tiene una rotación de 33 años alrededor de la Tierra (que en sí mismo es un número muy espiritual), por lo que cada 33 años la lluvia programada regularmente se convierte en una tormenta de meteoros.

Tormentas de meteoros

Las tormentas de meteoros se diferencian de las lluvias de meteoros en que la densidad de meteoritos, así como la frecuencia de su caída, aumentan enormemente. Una lluvia de meteoritos normal es un bello espectáculo para la vista, pero una tormenta de meteoritos es mucho más grandiosa, ¡con cientos de meteoritos brillantes cayendo por hora! La tormenta de meteoros Leónidas de 1833 fue tan intensa sobre Norteamérica que se cree que es la causa moderna de que ahora conozcamos la diferencia entre una tormenta y una lluvia de meteoros. En 1833 nadie sabía lo que era una tormenta de meteoritos; tanto los nativos americanos como los cristianos y los mormones se sintieron inspirados para redactar tratados de paz y sermones debido al sobrecogedor cielo nocturno. Aunque no se vio con la misma magnitud fuera de Norteamérica, en todo el mundo se hablaba de la tormenta de meteoros de las Leónidas de 1833… ¡y esta tormenta es algo que podemos ver una vez cada 33 años!

Cómo celebrarlo

Por supuesto, lo primero que debes hacer es planear salir al exterior y ver el espectáculo de luces por ti mismo. Cuando se trata de ver cualquier actividad celeste, siempre es mejor desplazarse a un lugar donde haya la menor contaminación lumínica posible. Así que, si vives en una ciudad, quizá quieras salir un poco de ella y encontrar un lugar donde sentarte y disfrutar del cielo nocturno fuera de los confines de las luces de la ciudad. A continuación, busca Leo en tu propia carta natal para ver qué parte de tu vida se ilumina este 17 y 18 de noviembre con la lluvia de meteoros de las Leónidas.

Cómo encontrar a Leo en tu Carta:

Todo el mundo tiene a Leo en algún lugar de su carta. Puede que algunos tengamos soles y lunas Leo, pero aunque no tengas una colocación Leo, este signo de fuego está sentado en la rueda de tu carta natal en alguna parte. A continuación he elaborado una práctica lista que puedes utilizar para ver en qué casa se encuentra en tu carta natal.

Signo ascendente Casa de Leo
Aries 5º-placer y diversión
Tauro 4.º Hogar y familia
Géminis 3º-Comunicación y mente
Cáncer 2º-dinero y autoestima
Leo 1º-el yo y el cuerpo
Virgo 12º – transformación y renacimiento
Libra 11º-Comunidad y amigos
Escorpio 10º-objetivos profesionales y aspiraciones vitales
Sagitario 9º-creencias espirituales y filosofías personales
Capricornio 8ª – conexiones emocionales y energéticas
Acuario 7ª-asociaciones serias
Piscis 6ª-Salud, hábitos y trabajo

Así que, utilizando tu signo ascendente, averigua en qué área de tu vida brillará la lluvia de meteoritos. Por ejemplo, si tu signo ascendente es Libra, se iluminará tu casa 11 de la comunidad y la amistad, o si eres Piscis, se iluminará tu casa 6 de la salud, los hábitos y el trabajo. La noche del 17 o 18, cuando las Leónidas brillen más en el cielo nocturno, planea hacer un ritual que honre las colocaciones de Leo que tienes y/o la casa que Leo ocupa en tu carta. Esto puede ser tan sencillo como escribir una intención en un trozo de papel y quemarlo, o sellarlo con cera y planear abrirlo el año que viene bajo la próxima lluvia de meteoritos de las Leónidas. También puedes considerar hacer un poco de magia glamurosa, ya que Leo es el signo de la creatividad y la belleza, así que plantéate hacer algo como teñirte o cortarte el pelo, hacerte un tatuaje nuevo, comprarte ropa nueva o arreglarte con tu ropa y maquillaje favoritos, pero asegúrate de honrar a tu león o leona interior bajo esta lluvia de meteoritos.