El número Tres representa la Trinidad, que incluye mente, corazón y Espíritu, y la triple naturaleza de la divinidad.
Simboliza el principio de «crecimiento» y significa que hay una síntesis presente en la imaginación y una efusión de energía en acción.
Trinidad 333
El número 3 representa el principio del aumento, la expansión, el crecimiento y la abundancia a nivel físico, emocional, mental, financiero y espiritual.
También resuena con los Maestros Ascendidos y otras deidades diversas.
El Número 3 es la conexión de la Conciencia Crística’.
El número dos representa lo Divino Masculino y lo Divino Femenino en perfecto equilibrio.
El número uno es masculino y representa la mente, y el número dos es femenino y representa el corazón.
El número tres es el Espíritu en unión con lo Divino masculino y femenino.
Es esta conexión sagrada que existe en todos nosotros.
El número 3 se relaciona con el ánimo, la comunicación, la libertad, la aventura, la exuberancia, la inspiración, la creatividad, la desenvoltura, la visión, el humor, la energía, la apertura, la espontaneidad, la amplitud de miras, el optimismo, la bondad, la fe, la esperanza y la caridad, la cultura, el ingenio, la diversión, la valentía, la exuberancia, la brillantez, el canal abierto, el ritmo, el amor al placer, la alegría, el arte, la pasión, la sensibilidad, la capacidad psíquica, la conciencia social, la autoexpresión, el entusiasmo, la juventud, la imaginación y la manifestación de tus deseos.
Es el número que se refiere a la recepción de «mensajes» importantes.
Cuando el número tres aparece en el contexto de un sueño o visión, es señal de que alguien de los reinos superiores está enviando un mensaje.
También puede aparecer en forma simbólica, como ver tres cuervos, un círculo o anillo de tres robles y repetir afirmaciones tres veces.
En el Triángulo corre una corriente de energía sagrada
También existe el dicho de que cuando oyes el mismo mensaje de tres fuentes no relacionadas en un breve periodo de tiempo, no es una coincidencia.
Es una señal o confirmación del Universo para que prestes atención o sigas adelante con lo que se transmite en este mensaje.
Es como Ricitos de Oro y los tres osos… dos no son suficientes y cuatro son demasiados, pero tres es lo justo porque es el número perfecto.
El ÁNGEL NÚMERO 333 resuena con las vibraciones y energías del número 3, apareciendo tres veces, lo que triplica su influencia.
El Ángel Número 333 nos dice que nuestros Guías Espirituales están cerca de nosotros, han respondido a nuestras plegarias, desean ayudarnos en nuestros esfuerzos y con el servicio a nuestro propósito de vida y misión del alma.
Los treses triples nos animan a ser creativos, sociales y expresivos, utilizando nuestras capacidades, dones y talentos naturales para potenciarnos a nosotros mismos, al tiempo que elevamos e iluminamos a los demás, porque nuestras capacidades para trabajar con la luz y nuestra misión en la vida deben utilizarse para el bien de todos.
Es importante mantener una actitud positiva hacia nosotros mismos, los demás y el mundo en general para manifestar paz, amor, armonía y tener fe en la humanidad en su conjunto y en el futuro de nuestro mundo.
Vivir auténticamente manteniéndonos firmes en nuestra verdad y expresarnos con claridad, propósito y amor, y ser un faro de luz para los demás.
El Signo Divino
333 es una señal divina de que estamos seguros, protegidos y de que todo va bien en nuestro camino.
Ser infantil y juguetón significa estar abierto y reconocer que la Fuente siempre está dispuesta a ayudarnos.
La vida consiste en las experiencias de nuestro viaje, no en el destino.
La clave consiste en transformar nuestra vida en juego, risa y estar en el momento presente sin preocuparnos del pasado ni del futuro.
Tómate tiempo para alimentar tu alma viviendo tu vida de forma divertida y lúdica.
El juego es una parte importante de nuestra experiencia humana.
Fuimos creados en forma humana con el ADN espiritual del Creador Único y sostenemos esta Llama Divina en nuestro interior.
Con el profundo conocimiento de que somos una expresión humana del Creador, nos damos cuenta de que no hay división entre ser espiritual y SER humano.
Cuando vivimos como humanos, estamos siendo espirituales y, puesto que ser humano es espiritual, ser juguetón es una actividad espiritual.
Cuando jugamos, nos relajamos, ya sea descansando, soñando despiertos o disfrutando de nuestro pasatiempo favorito.
Nuestra mente conecta de forma natural con la fuerza divina del Creador Único y, cuando estamos en un estado relajado y somos conscientes de lo que nos rodea, nuestra mente se abre a las ideas, se agudiza la imaginación creativa, la conexión espiritual es más fuerte y estamos más capacitados para recibir inspiración y guía divinas.
El significado de 333 nos pide que escuchemos a nuestro cuerpo, nos demos cuenta de nuestros sentimientos y expresemos nuestra verdad para, en última instancia, recuperar nuestro poder.
Expresar nuestra verdad desencadena momentos de gran revelación que son muy curativos para nosotros y, cuando compartimos nuestra verdad con los demás, puede ser muy curativo para ellos.
Decir lo que nos importa y compartir nuestra verdad inspira acciones para transformar nuestra forma de vivir y la de los demás.
Es una forma de iniciar conversaciones y, en última instancia, una forma de crear un cambio en nuestro mundo.
Cada historia empoderada que se comparte es una oportunidad de hacer que alguien sienta que no está solo en su viaje humano.
Sintoniza con tu alma
La vida siempre está cambiando, así que todo lo que podemos hacer ahora es estar en sintonía con nuestra alma y expresar nuestro auténtico yo cuando nos sintamos guiados en el momento adecuado.
Empezamos a comprender que hace falta valor para levantarse y decir nuestra verdad y nos damos cuenta de que hace falta el mismo valor para sentarse y escuchar.
En conjunto, comprendemos que expresar nuestra verdad es saber cuándo es el momento adecuado para escuchar y cuándo es valioso compartir.
333 nos asegura que estamos en el camino correcto.
Ha habido momentos en los que no reconocíamos nuestro camino y nos sentíamos perdidos porque la vida no estaba clara, pero luego nos damos cuenta de que ciertas circunstancias tuvieron que ocurrir «para que» tuviéramos la oportunidad de ver con claridad lo que hace feliz a nuestra alma.
Cuando tenemos más claras nuestras necesidades del alma, empezamos a irradiar una vibración energética que atrae a las personas y situaciones adecuadas para ayudarnos en nuestro camino. Atraemos lo que somos, no lo que deseamos, porque la ley de la atracción afirma que «lo semejante atrae a lo semejante» y atraemos a nuestra vida a personas que resuenan con nuestra verdad.
Tienes que tomar una decisión importante para la siguiente fase de tu vida y, decidas lo que decidas, confía en que estás siendo apoyada divinamente en todos los sentidos.
Ésta es la conclusión de la magia que encierran los Números de los Ángeles 333. Espero que comprendas mejor esta corriente sagrada y permitas que sus principios divinos te guíen en tu viaje.
