Comprender la Ley de la Atracción y cómo utilizarla
25 julio 2019 | Philippe Kerforne
No importa quién seas, dónde vivas, tu nivel de inteligencia, tu situación económica -incluso si eres pobre-, puedes poner en práctica el Gran Secreto: la Ley de la Atracción que puede cambiar tu vida completa y radicalmente, hacer realidad todos tus sueños y llevar por fin el tipo de vida con el que has estado soñando.
Para ello, debes aprender y utilizar los secretos desvelados en este artículo sobre la Ley de la Atracción.
Ponla a prueba y cree en su poder, y hará milagros en tu existencia, igual que hizo con miles de personas de todo el mundo durante siglos: ¡desde las estrellas más famosas hasta la gente más corriente!
¡Comprende la Ley de la Atracción y aprende a utilizarla de inmediato!
Los orígenes de la Ley de la Atracción
Su origen se remonta a los albores de los tiempos.
Desde aquellos lejanos tiempos, ha tenido diversos nombres, pero la Ley de la Atracción nunca ha decepcionado a nadie que la practicara con el estado mental adecuado.
Las pruebas escritas más antiguas proceden del Antiguo Egipto de los faraones. La Ley de la Atracción tiene tal poder de transformación sobre cualquier existencia que muchas personas han intentado guardársela para sí, prohibiendo su uso entre otros seres humanos, o incluso intentando destruir cualquier prueba escrita… ¡en vano!
La ley universal que rige nuestra vida
En efecto, esta Ley de Atracción no puede destruirse, pues es una ley universal que rige el universo y el mundo, y lo ha hecho durante eones.
Esta Ley de la Atracción no es una invención humana, es una ley cósmica eterna, y por eso nunca puede ser destruida, ni ocultada, ni olvidada… Se comparte a través de una corriente invisible y sutil, en otras palabras: como vibraciones positivas de una mente a otra, o a través del encuentro entre personas de buena voluntad, a través del intercambio de enseñanzas espirituales, e incluso en los libros… por eso es invulnerable y tan fuerte.
Si la practicas como se describe a continuación, puede traerte CUALQUIER COSA: riqueza, suerte, amor, fidelidad, salud y mucho más, dependiendo de lo que desees… ¡Siempre que, por supuesto, tus intenciones sean positivas y estén destinadas a hacer el bien en este mundo, ya sea en tu favor o en el de otras personas a las que desees ayudar de un modo u otro!
¡Puede hacer verdaderos milagros en tu vida y llevarte por un camino completamente distinto del que sigues hoy!
Puede hacer realidad cualquiera de tus deseos y garantizar que tus sueños se hagan realidad pronto y de forma duradera.
Podrías decirme que es «¡Demasiado bueno para ser verdad!».
… Y lo entendería, sobre todo si te disgusta tu existencia actual, y sobre todo si ya has probado todo lo demás, o si has ensayado sin éxito varios métodos con resultados fugaces, si es que has obtenido alguno.
No te pido que creas en mi palabra, sino que apliques realmente la Ley de la Atracción.
Ni siquiera intentaré convencerte de lo cierta y eficaz que es, porque mi convicción no puede flaquear.
Cada uno de los miles o incluso millones de personas que la practican con una mentalidad positiva y abierta no es más que una prueba adicional sobre ella.
¡Dale una oportunidad y no te decepcionará!
Puedes encontrar numerosas pruebas y testimonios sobre su eficacia en Internet, ¡así que iré directamente al grano para que puedas aplicarla cuanto antes!
Hablando claro: la Ley de la Atracción es la capacidad de materializar tus pensamientos en tu vida mediante palabras y acciones, para que tus deseos se hagan realidad en el mundo.
Las cuatro fases para aplicar la Ley de la Atracción son sencillas:
Expresa tu sueño
Visualízalo
Actúa como si fuera tu realidad actual
Emprende una acción masiva para conseguirlo.
Puedes ser o tener cualquier cosa que quieras ser o tener a través de esta ley cósmica… dependiendo de la forma en que pienses.
En otras palabras, atraes vibraciones de naturaleza similar a tus propios pensamientos.
Si tienes pensamientos negativos, atraes vibraciones negativas que se materializan a través de ideas, palabras y acciones negativas.
Como consecuencia, no podrás mejorar tu suerte en la vida, sólo conocerás a personas que se opondrán a tus planes, y vivirás situaciones difíciles… Por el contrario, si tienes pensamientos positivos, atraerás vibraciones positivas que te ayudarán a mejorar tu existencia y a conseguir lo que deseas: dinero, amor, suerte, salud, un trabajo… o a que se cumpla cualquier otro deseo que quieras ver materializado en tu existencia.
Como tal, la Ley de la Atracción se sitúa en el núcleo de la práctica del pensamiento positivo, en sí mismo un método muy eficaz que inspiró varias vías de desarrollo personal, enseñanzas espirituales y religiones…
¿Qué ocurre cuando no practicas la Ley de la Atracción?
A decir verdad, podría decirse que, sin saberlo, estás practicando la Ley de la Atracción de un modo actualmente negativo si no estás satisfecho con tu vida en este momento.
En efecto, si la Ley de la Atracción es la capacidad de generar pensamientos de naturaleza similar a tus propios pensamientos, entonces si no tienes el tipo de existencia que deseas significa que estás generando pensamientos negativos que tienen consecuencias nocivas en tu existencia.
No tienes por qué sentirte culpable por ello, resentirte o infravalorarte porque no lo sabías, o mejor dicho, ¡no sabías que estabas practicando (sin querer) la Ley de la Atracción de forma negativa!
¡Ahora lo sabes y no es demasiado tarde para volver a poner las cosas en orden!
Por ejemplo, si quieres ser rico pero piensas que es difícil conseguir mucho dinero, o que nunca podrás hacerlo, ¡estos pensamientos negativos -que llamaré «venenos de la mente»- generarán pensamientos, palabras y acciones que te impedirán ganar más!
Si buscas el amor pero piensas que no eres lo bastante bueno, lo bastante guapo, lo bastante inteligente, lo bastante listo… para encontrar a alguien, o que nadie podría interesarse por ti… entonces generarás pensamientos, pronunciarás palabras y harás cosas que te alejarán de tu objetivo final.
Tus pensamientos negativos se materializarán de muchas formas distintas: pasarás al lado de personas que podrían interesarte sin fijarte en ellas, y ellas no se fijarán en ti… Faltarás a tus citas con personas que te interesan o te olvidarás de ellas, no encontrarás el valor para hablarles o fracasarás en tus intentos de seducción.
No expresarás tus sentimientos; tus relaciones durarán poco… Todos estos acontecimientos negativos se interpondrán en tu camino hacia la vida romántica de tus sueños.
Otro ejemplo: si quieres ver cumplido uno de tus deseos, pero no crees realmente que no pueda hacerse, la Dama de la Suerte no acudirá a ti o te dará la espalda.
Entonces pensarás que nunca podrás tener suerte y, como consecuencia, ¡la mala fortuna se te pegará como el pegamento!
¿Qué ocurre cuando practicas la Ley de la Atracción?
¡Todo esto será un recuerdo lejano si empiezas a utilizar consciente y positivamente la Ley de la Atracción a partir de ahora!
Practicar la Ley de la Atracción te resultará fácil si crees en ella y la pones en práctica con regularidad.
Así podrás conseguir rápidamente resultados asombrosos.
Empieza pidiendo que se cumplan deseos sencillos de conseguir, y luego aumenta la dificultad apoyándote en tus éxitos pasados.
De hecho, puede que te lleve bastante tiempo convertir tu estado mental actual -el que no te aportó lo que esperabas de la vida- en una mentalidad positiva que te garantice el éxito en cualquier ámbito.
Aquí tienes tres ejemplos sobre la riqueza, el amor y la suerte que pueden ilustrar este principio y que se desarrollarán en mis próximos artículos, pero que si los pones en práctica ya te pondrán en el camino de la materialización del enriquecimiento de tu vida amorosa ideal y de tus sueños.
Para ello, sólo tienes que pensar casi en el polo opuesto de tu estado mental actual en uno, dos o incluso los tres ámbitos, si aún no has alcanzado tus objetivos en estos aspectos.
Ley de atracción del dinero
La forma más fácil de hacerse rico es simplemente creer que puedes serlo y que no hay ninguna razón para que no lo consigas.
Muchas personas se han hecho ricas independientemente de su clase social, entorno, origen o nivel inicial de inteligencia… Hacerse rico no es una cuestión de condiciones previas favorables, sino más bien un estado mental.
Así pues, confía en que puedes hacerte rico y disipa cualquier pensamiento que pueda empujarte a hacer añicos la tercera creencia.
El flujo de negatividad pronto se secará y será sustituido por ideas llenas de creencia en que ¡te harás rico!
Por ejemplo, si quieres hacerte rico pero piensas que es difícil hacerse rico, o que está siempre fuera de tu alcance… ¡estos pensamientos negativos que yo llamo «venenos de la mente» y que generarán pensamientos, palabras y acciones que te impedirán ganar más dinero!
Así que pon en práctica las cuatro fases descritas anteriormente para beneficiarte de la Ley de la Atracción en todo lo relacionado con la riqueza.
Expresa tu sueño: hacerte rico, la cantidad que te gustaría ganar…
Visualízalo: imagina cómo podrías alcanzar tu objetivo.
Actúa como si fuera tu realidad actual: compórtate como si ya fueras rico.
Actúa masivamente para conseguirlo: haz todo lo que puedas para hacerte rico
La ley de la atracción en el amor
Si quieres encontrar el amor, tener éxito en tus intentos de seducción, tener una relación duradera… entonces la Ley de la Atracción también puede ser muy provechosa para ti.
Deberías convencerte, por ejemplo, de que no importa tu aspecto físico actual, la fuerza de tu mente y tu situación actual -incluso si llevas mucho tiempo soltero-, ¡hay alguien, en algún lugar, que está hecho sólo para ti!
Dite a ti mismo que no hay ninguna razón para que no encuentres el amor si sabes escuchar a tu media naranja, si te interesas de verdad por la pareja que te atrae y si te esfuerzas por satisfacer sus propias necesidades.
Luego, como a continuación, recorre los cuatro pasos de la Ley de la Atracción relacionados con el amor:
Expresa tu sueño: enamorarte, encontrar a la persona adecuada…
Visualízalo: imagina cómo podrías alcanzar tu objetivo,
Actúa como si fuera tu realidad actual: compórtate como si ya estuvieras enamorado,
Actúa masivamente para conseguirlo: haz todo lo que puedas para alcanzar tu objetivo.
Manifiesta tus sueños con la Ley de la Atracción
Si quieres alcanzar tus propios objetivos, necesitas creer de verdad que puedes materializarlos en tu vida cotidiana.
Empieza con un deseo que parezca fácil de conceder, pero que te resulte muy querido.
De hecho, cuanto más fácil te resulte el objetivo, más posibilidades tendrás de tener pensamientos positivos.
Éstos atraerán hacia ti vibraciones positivas proactivas del universo, y se convertirán en ideas, palabras y acontecimientos que facilitarán el cumplimiento de tus deseos.
Tendrás éxito si sigues los cuatro pilares de la Ley de la Atracción.
Expresa tu sueño: escribe el deseo que quieres cumplir y piensa en él todos los días…
Visualízalo: imagina cómo podrías alcanzar tu objetivo,
Actúa como si fuera tu realidad actual: compórtate como si tu deseo se hubiera realizado,
Actúa masivamente para conseguirlo: haz todo lo que puedas para alcanzar tu objetivo.
Todos los días debes tener pensamientos positivos sobre ese sueño en cuestión, diciéndote a ti mismo que puedes materializarlo en tu vida cotidiana y que acabará ocurriendo si lo crees de verdad.
Nunca tengas dudas sobre el cumplimiento de esta ayuda, porque aunque no lo creas de verdad, tu deseo no se manifestará o se alejará de ti.
La Ley de la Atracción, Utilízala eficazmente ahora
Ahora tienes todos los principios necesarios para utilizar eficazmente la Ley de la Atracción.
Ya sabes cómo utilizarla eficazmente.
Sigue practicando hasta nuestro próximo artículo, en el que aprenderás a planificar tu propio camino hacia la vida de tus sueños.
